Entre el paso a paso y el todo o nada
Ricardo Romero
Prof. Economía
www.juveniliacnba.org.ar
Esta dicotomía conceptual, en la que resumo el debate en los interclaustros del Colegio Nacional de Buenos Aires, básicamente reproduce un esquema de Reforma o Revolución, donde a alguien que plantea construir una base institucional de democratización a partir de consensos en la diversidad se lo cuestiona y a quien sostiene que hay que seguir el ejemplo del pueblo egipcio contra Mubarak se lo escucha sin al menos reflexionar sobre las distancias entre un dictador asesino y un rector que intenta mantener cierto decoro legal. Es más, sostener conquistas desde un "paso a paso" es criticada por quienes se plantan a decir que con esta gestión "nada" (habiéndose callado cuando podríamos haber sacado algo, incluso todo, si teníamos a Oscar De Gyndelfeldt en la terna).
Aquellos que consideren que pueden hacer una movida de maniobra, imponiendo un rector en base a la elección preponderante del claustro estudiantil pero sin consensos del claustro docente, no favorecen un marco de consenso democrático, es más, ese octubre puede devenir en un estalinismo. Hay quienes pensamos que es necesario construir un gobierno de todos a partir de lograr posiciones y construyendo un bloque hegemónico que marque las bases de un esquema político participativo, plural e inclusivo.
Y consensuar no implica renunciar, menos aún, replegar posiciones. De hecho, en lo personal, cuestioné la legitimidad de la elección del rector, llamé a reconocer las diferencias; cuestioné enérgicamente el dispido de las y los compañeros en pleno fin de año; critiqué el silencio del CER sobre los despidos docente; llamé a la necesidad de reglas de consenso que reencauce la política de expulsiones; y aliento al fortalecimiento docente para garantizar la defensa de derechos.
Por lo que intentar difamar a quien plantea consensos cuando su sector político fue fuertemente atacado con éstos despidos, es de mera mediocridad y miserabilidad política, más aún cuando se plegaron al pacto de silencio en la fraudulenta elección que excluyó a un candidato y allanó el camino a quien dicen querer enfrentar. Es más, quienes pretenden colocar la lucha contra el rector, antes que garantizar los puestos de trabajo de las y los compañeros, sólo intentan polarizar entre bueno - malo, cuando en realidad le dejan todo sus malos.
Como no comparto regalar espacios institucionales y considero importante la lógica parlamentaria de coaliciones y acuerdos, entiendo como un paso importante lograr revertir una medida injusta y lograr no sólo que se reintengren a las y los compañeros cesanteados, sino que además trabajar para implementar mecanismos participativos que generen consulta, deliberación y decisión sobre la política de gestión, como un marco transparente para seguir cambiando una realidad en la que muchos luchamos.
En tal sentido, es preciso seguir exigiendo la reincorporación de los y las compañeras como punto de partida para el funcionamiento académico e insitucional del Colegio. Bajo ese marco, espero que se perfile esta nueva gestión.
PD: Comparto con ustedes la Declaración de la Asamblea Docente del Colegio Nacional de Buenos Aires
http://docentescnba.wordpress.com/2011/02/15/por-la-reincorporacion-de-la-totalidad-de-los-27-despedidos-se-toman-las-mesas-pero-continua-el-conflicto-en-el-colegio-corre-peligro-el-inicio-de-clases-para-el-8-de-marzo-faltan-7-docentes-por-re/
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